Sin ninguna duda, la gran culpable de que las botas de agua sean en la actualidad uno de los calzados que marcan mayor tendencia en la época invernal es la firma Hunter Boots. Desde que Kate Moss las luciera en el festival de Glastonbury en 2005, tanto celebridades como seguidores y seguidoras de la moda se han rendido a esta marca que ofrece el diseño auténtico y exclusivo que se ha popularizado.
Las botas de agua Hunter han tenido el mérito de renovar el diseño de este calzado adaptándolo a un uso mucho más urbano que ha calado bastante en el sector. El haberlo conseguido de forma casi pionera deja a la firma en un lugar privilegiado en el mercado, actuando como una total referencia. Mucha gente no habla de “botas de agua” en muchas ocasiones, habla directamente de “botas Hunter” como si la marca hubiera absorbido el producto.
No obstante, no faltan competidores en el mercado que se hayan apuntado a la moda. En España podemos encontrar por ejemplo la marca Mustang, que ofrece también muchísimos modelos y a un precio más económico que las Hunter.
El tema económico aquí ofrece un interesante debate. Las botas de otras marcas suelen rondar entre los 45/60 euros, ofrecen mucha variedad e incluso en algunos casos también tienen modelos muy similares al “clásico” que ha popularizado Hunter (el de la característica hebilla). Por otro lado, la marca americana ofrece sus modelos por un precio entre los 90/110 euros, una diferencia más que considerable.
Sin embargo, no todas las marcas ofrecen un producto de la misma calidad, ya que las Hunter están fabricadas con caucho y forros especiales mientras que otras utilizan materiales que ofrecen peores resultados como el plástico. Si bien hay muchas marcas que sí tienen un producto equiparable en cuanto a calidad, lo que garantiza Hunter ahora mismo es la seguridad de encontrarlo sin sorpresas. Pero, obviamente, opciones hay muchas y no siempre la más popular o extendida será la que mejor nos venga.